Y POR FIN LLEGÓ EL DERBI

Pues si sevillistas, ya está aquí el partido más esperado por todos, el gran derbi sevillano, el encuentro esperado por todos para calentarle la oreja al eterno rival y tenerles calladitos por lo menos hasta que se juegue el partido de la segunda vuelta. Y es que el partido tiene todos los condicionantes morbosos de un derbi puesto que hemos tenido dos semanas de parón en la que se han producido todo tipo de declaraciones, en prensa, en los bares, entre aficiones, redes sociales y no es para menos dada la magnitud de este importante partido que paralizará una vez más la ciudad de Sevilla durante dos horas en la noche del 24 de Noviembre. Resulta evidente, viendo la clasificación, que el Sevilla FC llega mejor a este partido que el eterno rival, equipo que cierra la tabla, tan solo 9 puntos en 13 jornadas disputadas, con una plantilla que parece bastante peor que la del año pasado y por si fuera poco con varias lesiones de sus puntales importantes, entre ellos, el más determinante, Ruben Castro. Por su parte, el Sevilla llega con la moral por las nubes, con la mayoría de sus efectivos disponibles para el partido, habiendo ganado su primer partido a domicilio tras 14 meses y habiendo dado una imagen más que notable, curiosamente con Rakitic jugando por delante de dos mediocentros defensivos, lo que le dio al equipo un mayor equilibrio en todas sus líneas. Pero, al mismo tiempo, en este tipo de encuentros juega otro factor determinante que es la motivación, es un partido especial, por el ambiente, las semanas previas, el pique entre aficiones, el día del partido, las horas previas... lo que hace que se convierta en un partido igualado dando igual la situación clasificatoria de ambos conjuntos lo que supone que, a priori, sea un partido con pocos goles algo que no se produjo la temporada pasada, cuando por estas fechas, se produjo el resultado de la manita, que aún escuece por territorio verdiblanco. Con todos estos ingredientes se presenta el primer derbi sevillano de la temporada, desigual en la clasificación, pero nivelado como siempre por ser lo que es, un Sevilla-Betis, el partido de la ciudad de Sevilla, en definitiva, el mejor derbi del mundo, en el que todos esperamos dar la "puntilla" al eterno rival, al menos hasta el de la segunda vuelta para poder volver a saludarles con "la manita" (esto es más complicado) pero no imposible. La afición se volcará como siempre, y en este partido más que en ningún otro, con el equipo sevillista y todos esperamos que sea una fiesta del fútbol sevillano, sin incidentes, dentro y fuera del campo, que estamos hablando de un partido de fútbol, y sobre todo, que prevalezca el espíritu de Puerta y de Miki Roque. Dicho esto, me despido, como siempre, con mi habitual grito de guerra, deciros que llevo varios días subiéndome por las paredes, como buen sevillista, que soy, y deseo que llegue ya las 21 horas del domingo para vibrar con el mejor derbi del mundo y que tenga como, debe ser, color sevillista a su finalización. Buenas noches a todos y VIVA EL SEVILLA